Un gato, un pájaro o un zorro. Cada vez que llenes de leche tu bol de desayuno aparecerán animales que nunca imaginaste que podían estar ahí. La diseñadora francesa Geraldine de Beco firma su primera colección con Bernardaud, una importante marca de porcelana francesa que se fabrica desde el siglo XVIII.
Los cuencos de cerámica de Bernardaud incluyen una pequeña sorpresa cuando se llenan de líquido. Cuando los platos están vacíos parecen tener extrañas esculturas alrededor de los bordes, pero cuando los platos se llenan de leche, una forma de un animal aparece como por arte de magia. Sin duda, hacen sonreír.
Las siluetas de los animales son elaboradas por expertos ceramistas y artesanos de primer nivel. No sólo cuentan con un diseño novedoso en las formas de animales sino que además los propios cuencos están fabricados con porcelana de Limoges (France). Una porcelana preciosa, muy antigua y que le otorga unos colores brillantes al acabado.
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